Florida fue una parada oportunista, nada intencionado, algo así como "ya que el avión hace escala... por qué no?" Y sin dudarlo, fue un gran acierto!
Estuvimos 4 noches en Miami y 3 en Orlando, y nos movimos por allí con un coche de alquiler. Conducir en USA es fácil, los límites son claros y hay muchas menos prohibiciones que en casa. Si sumas a eso que el coche es barato y la gasolina también, creo que es la mejor manera de moverte por Estados Unidos.
El primer día nos despertamos a las 4:30 a.m. por eso del jet lag... y decidimos aprovecharlo! Bajamos hasta los Cayos (3 horas de viaje) con algo de lluvia. Sale el sol cuando llegamos a Cayo Hueso (Key West... la traducción es made in Spain sin duda). Aquella zona tiene mucho de Caribe y poco de ritmo estresante.
De vuelta paramos en una de las pocas playas de los Cayos (quizás eso fue lo que más me sorprendió de la zona) y nos damos un buen baño en una solitaria Sombrero Beach.
Dedicamos el siguiente día a recorrer Miami. Tras un paseo por Miami Beach, vamos al Barrio Cubano, que resulta ser lo más pintoresco de Miami.
Por la tarde cruzamos a Key Biscaine, otra playa enorme y solitaria.
Amanece lloviendo de nuevo el día que hemos destinado para conocer los Everglades. Aunque estamos visitando Florida en la estación húmeda de huracanes somos muy afortunados porque entre lluvia y lluvia disfrutamos de buenos ratos de sol. Los Everglades son un enorme manglar con una carretera que atraviesa de Este a Oeste al límite del agua. Y sinceramente, no esperaba ver tantísimos caimanes! Y no solo en el paseo en aerobarco... al pie de la carretera se podían ver con mucha facilidad!
Acabamos el día en Naples, al oeste de Florida, con una preciosa puesta de sol entre nubes.
Nos marchamos de Miami a Orlando por la costa, y de camino vemos los canales y yates de Fort Lauderdale, Boca Raton y Palm Beach. Después de un bañito desafiando los peligros de la playa y comida en Riviera Beach seguimos viaje hasta Orlando.
Increiblemente puntuales nos plantamos en la puerta del parque Animal Kingdom Disneyworld. Hemos elegido esta mezcla de parque de atracciones y zoo para no repetirnos, porque tenemos previsto visitar Universal Studios en Los Angeles, y porque éste parece una buena opción para dos adultos. Y sin duda, acertamos!! Nos ha gustado mucho el parque. Las atracciones relacionadas con animales están muy cuidadas: el Safari Kilimanjaro, las preciosas pajareras donde casi te tocan miles de pajaros de colores, los grandes mamíferos en las recreaciones de su hábitat... Y los espectáculos son para disfrutar de verdad: el musical de Nemo, las rapaces volando a ras de cabeza en Flights of Wonder y el divertido Festival del Rey León. Pero, sobre todo, no hay que perderse la sorprendente It's tought to be a bug! (es duro ser un bicho!) donde acabas disparado, rociado con ácido, gaseado y pinchado pero con una formidable sonrisa. Además hemos encontrado muy pocas colas y hemos podido hacer 4 expediciones al Everest!
Al día siguiente nos escapamos a Daytona Beach. Vemos el mítico circuito y nos damos un baño en una playa preciosa y muy típica, donde antes se hacían carreras con los coches. Seguimos hasta San Agustín, primera ciudad fundada por los Españoles y nos paseamos por su barrio histórico y sus colegiatas.
Mañana, saltaremos de costa. See you, Florida!
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada